La Biblia da varios ejemplos de las actividades que
deben caracterizar a un cristiano, que
a la verdad está sirviendo a Dios -
algunas de ellas mencionadas 2, 3, 4 o más veces a través de la Biblia.
Vimos previamente que la Gran Comisión es la prioridad superior de Dios en la
tierra para este tiempo, pues facilitará la segunda venida de Jesús como Rey
atrayendo consigo las reglas de su Reino a la tierra.
Por lo tanto, la Biblia da muchas referencias de que
los cristianos deben mirar hacia el trabajo de la culminación de la Gran
Comisión y el retorno de Jesús. De hecho, en no menos de 9 pasajes, la Biblia
demuestra que los cristianos deben mirar expectantes a lo que facilite su
vuelta.
1ª Corintios 1:7 “De tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la
manifestación de nuestro Señor Jesucristo”.
Filipenses 3:20
“Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos
al Salvador, al Señor Jesucristo”.
1ª Tesalonicenses 1:10 “Y esperar de los cielos a su Hijo, al cual
resucitó de los muertos, a Jesús quien nos libra de la ira venidera”.
2ª Timoteo 4:8 “Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me
dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos
los que aman su venida”.
Tito 2:13 “Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de
nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo”.
Hebreos 9:28 “Y aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para
salvar a los que le esperan”.
Hebreos 10:25 “Sino exhortándonos; y tanto mas cuanto veis que aquel día se
acerca”.
2ª Pedro 3:12 “Esperando y apresurándonos para la venida del día de Dios, en el
cual los cielos encendiéndose, serán deshechos”.
Judas 21 “Conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro
Señor Jesucristo para vida eterna”.
Al leer los 9 versos somos testigos de la Palabra de
Dios, ¿puede usted decir que las Escrituras antedichas describen en exacto su
experiencia cristiana? ¿está usted mirando hacia adelante y trabajando a favor
del día cuando Jesús vuelva a la tierra? ¿ha tomado usted como compromiso
personal la tarea de llevar el Evangelio a todo aquel que nunca lo haya oído?
¿se ha vuelto su anhelo de vida tanto que ha invertido en ello su tiempo,
energía y dinero? Quizás usted sea fiel en trabajar en su iglesia local, pero
nunca ha invertido en la gran misión global de nuestros días, con el fin de
llevar el Evangelio a quienes nunca antes lo han oído.
Hay muchos diciendo: “Tengo miedo, me puedo
decepcionar”. Usted mismo podría ser uno de esos. Tal vez usted pudo haber ganado muchas almas en su ciudad, puede
haber sido el más fiel en su iglesia y está bien, pero ¿qué ha hecho por los
que viven en la oscuridad pagana? ¿Ha pensado siempre en ir usted mismo en su
ayuda? ¿Ha dado siempre de su dinero para otro que sí pudo ir? ¿Usted ha orado?
¿Qué lugar ha ocupado usted en la Evangelización Mundial? ¿Ha sido usted obediente en este
mandato? - Tomado de Pasión por Las
Almas, Oswaldo J Smith
Por consiguiente, es de vital importancia que cada
cristiano descubra y trabaje en realizar su parte dentro de la Gran Comisión,
según lo antes citado por Oswaldo J Smith, quien correctamente identifica tres
amplias áreas en que la gente puede contribuir:
1) poder ir y predicar, personalmente
2) poder orar por el que va y predica
3) poder financiar o contribuir con el que va y
predica
Hay indudablemente todo tipo de ministerios
específicos que contribuyen a la misión mundial y que parecen calzar en una de
estas categorías. Pero el gran llamado
es para cada uno de nosotros, que podamos encontrar nuestro rol y derramarlo
con todo el corazón, tanto que satisfagamos el arduo trabajo de esta hora.
El dinero es necesario y “alguien” debe
darlo. Habrá quienes deban hacer las
cuerdas de contacto en el país de origen. Y si usted, mi amigo, no puede ir,
entonces quizás Dios quiere que usted sea un enviador para que otro vaya en su
lugar. Su parte será ganar dinero y hacer posible que otro vaya. Y recuerde, la
recompensa será compartida igualmente con usted.
Por otra parte están las oraciones. Es posible que
usted gane dinero suficiente como para suplir nada mas que sus propias
necesidades, por lo que en esas condiciones no podrías enviar a otro pero
entonces puedes ser un intercesor.
Usted puede pasar un lapso de tiempo en África, India, China, etc. cada
día. Si, porque usted puede conseguir
una lista de misioneros y orar por ellos. Esta podría ser su responsabilidad, y
de ser así, contraerá sus cargas como propias.
Así usted también podrá disfrutar de la recompensa por haber sido fiel
orador a favor del que fue, usted será parte de su trabajo.
Finalmente están los que van. Si usted es sano y fuerte, si tiene o puede
conseguir el entrenamiento necesario y se siente preparado, usted puede
ir. El llamado vendrá sobre usted
mientras se mantenga en oración acerca de su misión en la vida y pronto sabrá
la respuesta, que Dios lo está llamando.
Le desafío al trabajo más grande del mundo. Abrogo a usted para ir si
puede, nada se le compara; porque los misioneros son los Aristócratas de Dios,
la aristocracia de la iglesia. Usted se
asociará con la gente más fina de la tierra. – Tomado de Pasión por Las
Almas, Oswaldo J Smith.